El Hombre Araña

El recuerdo más viejo que tengo de mi, interesado en los cómics del Hombre Araña fue hace un montón de años. Iba en la primaria y mis cuates eran fanáticos de los cómics y los superhéroes. Coleccionaban de todo, tarjetas, cómics, figuras de acción que compraban en Escatorama y yo apenas podía comprar una revista cada 15 días. Lo primero que tuve fue el número uno que sacó Editorial Vid en su primera etapa con spidey. Venía de regalo con el Crossover de Superman vs El Hombre Araña. Pa' su madre! para un niño de 10 años era la pelea del siglo (hace unos años releí el cómic y creo que sólo me sacó una que otra sonrisa).

Creo que me gustan sus historias porque de alguna manera me identifico con él. Entiendo como se sintió en su primera etapa cuando era un geek o ratón de biblioteca, cuando nadie lo pelaba. Luego no simpre le salen bien las cosas y cuando medio parecen componerse pasa mierda y media y queda 10 veces peor de lo que estaba. Suele pasar.
Aunque no soy fan de nada he planeado desde hace tiempo comprar todo lo que pueda de este cuate, principalmente los cómics. Antier comencé esta meta coleccionista que se une a la de colección de videojuegos (un par de hobbies bastante costosos, ¿no?) y me da gusto retomar el pasatiempo, comenzando con un cómic cuya portada que desde que la vi ha captado mi atención:



Pronto llegará junto con otros 3. Ya contaré que tal están.

Un gran poder implica una gran responsabilidad.

El 8 del 8 del 8

| 2 comentarios

Era el 2 del 2 del 2. Ella se sentaba en el pupitre de al lado y le hice notar la curiosidad de la fecha en la que estabamos. Días después nos estabamos besando en unas oficinas en el segundo piso de algún edificio de Satélite. Me tomó por sorpresa, ya me traía ganas de días atrás, pero yo no le había dado chance de nada. Me daba miedo intentar algo con una persona 7 años mayor que yo. Lo recuerdo casi todo, las fechas, las palabras, las situaciones y la rapidez. Todo ocurrió muy rápido, como todas las relaciones que he tenido en mi vida. Un día estás en clase de Geometría explicando curiosidades de las fechas mientras la maestra habla en el fondo y al otro te estás alejando de una perfecta extraña que parecía darle sentido a todo. Ya pasaron 6 años, caí en cuenta de esto hace unos días mientras me bañaba. De pronto todos recuerdos volvieron a mi mente. En el fondo me pedía a gritos estar con ella, no de la manera física y pasional (en la que normalmente compartíamos el tiempo a solas) sino de una manera más especial y el día que estaba a punto de saltar al vacío del gran "Sí, vamos a estar juntos a oficializar esto, a comprometernos y ver que pasa" terminó con todo en una fiesta de cumpleaños, en su fiesta de cumpleaños. Creo que unos días fueron mucho esperar y para saltar al vacío del compromiso (por no llamarlo amor) no hace falta pensarlo tanto. So, todo terminó y efectivamente me alejé de ella por completo.
Luego pasaron el 3 del 3 del 3 y el 4 del 4 del 4 etcétera etcétera etcétera. Por supuesto pasaron más personas tanto o más especiales que ella. A ninguna le hice notar la curiosidad de estas fechas.

El 8 del 8 del 8 habrán pasado más de seis años de aquel día. Seis años que se han ido tan rápido como aquel día. Y sigo sin saltar al vacío.

Debo dejar de pensarlo...